El explosivo fue descubierto el domingo en el Muelle George V durante trabajos en el aeropuerto.
El gerente general de la terminal, Robert Sinclair, reconoció que los pasajeros tendrán inconvenientes, pero dijo que el aeropuerto está cooperando plenamente con las autoridades «para resolver la situación lo más rápido posible».
La policía indicó que expertos en bombas trasladarán el objeto y lo destruirán bajo agua de forma controlada.
Las autoridades debieron despejar un área dentro de los 214 metros, incluidas varias calles residenciales mientras los oficiales trabajaron con especialistas de la Marina Real para retirar el dispositivo, el cual medía 1,5 metros.
Las autoridades ofrecieron alojamiento de emergencia a los residentes, dado que los trabajos de remoción continuarán hasta el martes.
Fuente: La Voz del Interior
