Casi 5 millones de niñas, niños y adolescentes son pobres en Argentina, ya que viven en hogares que no llegan a cubrir la canasta básica, así lo expuso un informe de la Universidad católica Argentina.
El 41,2% de los niños del país vive en estado de pobreza estructural, lo que representa a unos 4,7 millones de chicos cuyos padres no tienen ingresos suficientes para vivir, están mal alimentados, duermen en casas sin agua potable o cloacas, tienen problemas para acceder a la educación y escaso nivel de atención sanitaria.
Mientras que en 2017 el 37,1% de los niños era alcanzado por esta pobreza estructural, en 2018 esta cifra escaló 4 puntos, arronjando índices preocupantes de pobreza infantil.
El análisis sobre como está compuesta la pobreza debido a la falta de derechos, detalla que el 22,9% sufren carencias habitacionales (Hacinamiento o déficit estructural), 19% de los menores no posee acceso a la información (acceso a pantallas, libros infantiles o bibliotecas) y 18,5 en saneamiento básico (agua e inodoro con descarga). El 17,4% tiene déficit en el acceso a la atención de la salud, es decir que no visitaron un médico en el último año o no tienen las vacunas correspondientes. El 13,4% de los menores no están escolarizados o poseen escolarización deficiente, y el 8,7% carece de acceso a la alimentación.
Fuente: Infobae