El presidente Alberto Fernández pidió esta mañana que la cuarentena para posibles casos de pacientes infectados con coronavirus sea una «obligación» para no incurrir en el «delito de poner en riesgo la salud pública».
«Estamos viendo si la persona que cumple esa cuarenta de 14 días tiene la obligación de recluirse en su casa y no hacerlo voluntario como es hasta hoy. Si no lo cumple, estará incurriendo en un delito, el que pone en riesgo a la salud pública», sostuvo el el mandatario.
En diálogo con FM Delta, el jefe de Estado afirmó que quiere «llevar tranquilidad respecto de que la Argentina siguió todos los pasos que debía seguir frente al riesgo» y remarcó que «está rindiendo frutos» las medidas que implementó el Gobierno para contener la enfermedad.
El pedido surge luego de que se confirmara que son 19 los casos de coronavirus en la Argentina.
Ante este incremento del número de casos, el Gobierno dispuso una partida extraordinaria para Salud de $1700 millones, fondos que serán utilizados para mejorar el equipamiento de laboratorios y hospitales.
El presidente rechazó las críticas a su ministro de Salud, Ginés González García, que reconoció haber creído que el virus «iba a llegar más tarde». En este sentido el mandatario sostuvo: «El virus aparentemente se destruye con el calor. La Argentina y América Latina están en verano. Creíamos que iba a llegar más tarde pero para nuestra sorpresa llegó antes. Es una frase honestamente dicha que todos los infectólogos comprendieron del mismo modo«.
