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Educación

Desigualdades: camina 3 km para poder hacer la tarea

Matías es un adolescente de Lavalle -Mendoza- que debe caminar 3 km para poder tener conectividad y hacer sus tareas.

Matías es un adolescente de Lavalle -Mendoza- que debe caminar 3 km para poder tener conectividad y hacer sus tareas.Uno de los tantos ejemplo, de aquellos niños que han quedado al margen de la educación virtual.

La virtualidad pasó a representar una nueva faceta para la educación actual. A raíz de la cuarentena, el total de las instituciones del país, debió adaptar los contenidos diarios a plataformas digitales y aulas virtuales. Algo que parece ser una solución para que los alumnos puedan continuar con su aprendizaje. Pero existen niños y adolescentes que no pueden acceder diariamente a estas nuevas propuestas. La falta de conectividad en zonas puntuales o la imposibilidad de adquirir dispositivos electrónicos, hace que muchos estudiantes queden fuera de esta formación a distancia. Y Matías es un ejemplo de estas desigualdades, ya que debe caminar 3 km para poder conseguir un lugar con internet y así poder hacer su tarea.

Matías Jofré es el protagonista de esta historia. Quien sale de su casa en paraje Lavalle, Mendoza, para llegar a un puente en la ruta nacional 142 y poder adquirir conectividad. Es en este momento, cuando el joven, de 18 años, aprovecha para enviar trabajos y recibir los demás archivos para realizar. Así es la rutina que debe enfrentar Matías para poder seguir al día con su proceso educativo. 

En este paraje, cercano a La Asunción y a sólo 100 km de la capital mendocina, el internet es sólo un sueño. De hecho, allí la señal de telefonía celular también es intermitente, por lo que pueden pasar días sin saber de lo que pasa afuera.

El joven ya no asiste a la escuela técnica José Miguel Graneros de Gustavo André, donde cursa sexto año, y tiene que rebuscárselas para seguir aprendiendo desde su hogar. “Todas las semanas tengo entregas y la verdad se me está haciendo complicado”, reconoció el joven a diario Los Andes.

Al conocer la situación, la institución educativa le acercó un cuadernillo con actividades que le permite realizar las tareas de forma más sencilla. Pero al momento de entregarlas, debe hacerlo a través de fotos que pasa por whatsapp y por las que también necesita conexión. Matías aseguró que otros de sus compañeros están en la misma situación y se les hace muy complicado mantenerse al día con las actividades.

Fuente: Los Andes.

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