Concretado hace pocos días atrás, un nuevo movimiento en la tarifa del boleto urbano de pasajeros de la ciudad de Córdoba (el único en este 2017), no estuvo exento de polémica.
Las críticas le apuntaron a una calidad que no mejora en el servicio y la imposición de un artículo que permitirá subir la tarifa por decreto al Poder Ejecutivo, sin paso por el Concejo Deliberante.
Extraoficialmente, se supo que desde el primer minuto del miércoles próximo, se producirá el cambio en el boleto: de $ 12,55 a $ 15,38, lo que significa un 22,5 por ciento.
La suba anterior se había producido a fines de 2016, por lo que desde el municipio capitalino consideraron que una suba “acorde a la inflación” era lo correcto para compensar los ingresos de las cuatro empresas prestatarias.
La presunción de subas a principios de 2018 toma relevancia por el agregado del oficialismo: si los costos del gasoil (quita de subsidios de parte de la Nación mediante) o el incremento de salarios superan un límite, la actualización podría ser automática, vía firma del intendente Ramón Mestre.
