El hecho ocurrió durante la mañana de este martes, cuando una persona que no pudo ser identificada, intentó secuestrar a una niña que cursa el 5to grado de la Escuela Comandante Espora.
El hecho es doblemente grave, ya que el supuesto raptor actuó dentro mismo del establecimiento, con total impunidad.
El suceso fue corroborado por Fabián, padre de la menor quien en diálogo con AGNoticias dijo: «ella estaba en el colegio, como ve que uno de los baños estaba cerrado va al otro y es ahí en el patio, cuando se encuentra con un hombre que no conocía, de aproximadamente 1,80 mts, encamperado, con un cuellito y tapándose la boca le dijo ´vení que en el auto tengo una cosa, que te quiero mostrar´. Mi hija sospechó, porque además en casa siempre le decimos que tiene que desconfiar, y no quiso saber nada. Salió corriendo a avisarle a las maestras».
De acuerdo al relato del padre de la menor (relato que fue corroborado con una denuncia realizada más tarde en la Comisaría), «fue en momentos en que en el colegio estaban entregando bolsones de Paicor, y los maestros estaban ocupados en ese tema. Además, hay dos accesos a la escuela, uno por calle Liniers y otro el principal por el frente del colegio. Ella salió corriendo, le dio un ataque de nervios y entonces llamó la atención de una auxiliar, que avisa a dirección y llaman a la policía».
Esto ocurrió durante el turno mañana. En el colegio no existen cámaras de seguridad y se estaría buscando alguna en colegios o comercios cercanos. De acuerdo a lo dicho por el padre de la menor, «no alcanzó -por suerte- a hacerle nada, porque ella salió corriendo aún cuando quiso manotearla. Lo que uno no puede entender es que esa persona haya podido entrar así como así al patio mismo del colegio sin que haya ningún control».
Respecto al estado emocional de la menor, el padre dijo que «con el correr de las horas está más tranquila, igual no quiere ir al colegio porque no quiere que los compañeritos le pregunten nada».
Desde fuentes cercanas al hecho pudo saberse que la misma policía les hizo saber a las autoridades de la escuela que debieran tener mecanismos de control que actualmente no tienen, y que los ingesos al establecimiento deberían restringirse durante las horas de clase para evitar que una persona ajena al establecimiento entre sin ser controlada.
