El grupo de niños Guarda Arroyos tuvieron ayer por la tarde noche una jornada plena donde aprendieron y además tomaron conciencia sobre el cuidado de nuestro medio ambiente.
Fue una nueva actividad organizada en forma conjunta por Agrupación Guarda Arroyos y la Fundación Natura. Decenas de niños se concentraron ayer en el balneario El Cañito para recorrer las márgenes del Chicamtoltina. Reconocieron el terreno, y luego recogieron residuos limpiando nuestro hermoso curso de agua.
La tarea la cumplieron con la ayuda de sus padres y la coordinación de los organizadores. El resultado, kilos y kilos de basura de todo tipo recogida en tan solo un trecho del arroyo. Desde bolsas de plástico hasta botellas de vidrio, hubo todo lo que puede imaginarse y mucho más. Todo ello arrojado por la inconsciencia de la gente que luego de pasar un gran día en el lugar deja «su» basura en un lugar que es de todos.
Una tardecita completa
La tarde dio inicio con una actividad lúdica que sirvió para entrar en clima. Junto a la incansable y siempre dispuesta a dar una mano Julia Masciotta, niños y grandes realizaron una entrada en calor a pura diversión.
Pero antes de esta recorrida, Mauricio Balocco de Fundación Natura les dio a los chicos una charla sobre las piedras de la zona. Así, los niños aprendieron palabras nuevas para identificar rocas que tal vez vean todos los días. Mica, cuarzo, feldespato… identificándolas por sus colores o sus texturas y mostrando que están en todas partes aunque no nos demos cuenta.
Luego de la tarea, Eduardo Heredia (por parte de la Municipalidad) habló de la importancia que este curso de agua tuvo desde los inicios de la vida del hombre en esta zona. Heredia es hijo de quien donó su gran colección de restos arqueológicos encontrados en el lugar para lo que hoy es el Museo Arqueológico Municipal.
«Ha sido una muy linda actividad, lo mejor de todo es que cada vez se van sumando más niños, que a su vez vienen con sus padres. Crear conciencia es una tarea que lleva tiempo, pero empezando por los niños estamos formando a quienes serán los responsables de este mundo en pocos años más», destacó Nancy Panzardo, de Guarda Arroyos.
Un total de más de ochenta personas participaron de esta caminata ecológica. Niños, adultos, todos conscientes que algo hay que hacer para mejorar el mundo en que vivimos. Si el objetivo es crear una nueva mentalidad en la generación que viene, los Guarda Arroyos y la Fundación Natura sin dudas están sembrando una semilla que seguramente germinará.
