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Niños y jóvenes, desprotegidos ante las nuevas tecnologías

Este lunes, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) dio a conocer su informe anual, en el que por primera vez se acerca de manera integral a nivel mundial a los modos en que la tecnología digital afecta las vidas de los niños y adolescentes, tanto positiva como negativamente.

El marco es contundente: el 71% de los jóvenes se conectan periódicamente a internet, contra el 48% de la población que lo hace a nivel general.

En un marco de preocupación, el organismo dependiente de Naciones Unidas describe en “El Estado Mundial de la Infancia 2017” grandes riesgos a los que están sometidos los menores de 18 años de edad, particularmente porque “se intensifican riesgos tradicionales de la niñez como la intimidación, y fomentando nuevas formas de abuso y explotación infantil, como el material con contenido de abuso sexual infantil y su transmisión en vivo”.

Se describe que “más de 9 de cada 10 sitios de abuso sexual infantil identificados a nivel mundial están alojadas en cinco países: Canadá, los Estados Unidos, Francia, los Países Bajos y Rusia”.

En este punto, indicó que los “depredadores” pueden, “mediante perfiles falsos en las redes sociales”, tentarlos a que accedan a “foros de juego anónimos y sin protección”.

Entre los datos recabados, se presentó el caso de una niña a la que le prohíben conectarse a internet, como botón de muestra de que las mujeres tienen un doce por ciento menos de posibilidad de acceso que los varones.

Las desigualdades también se perciben en cuanto a las regiones: mientras en Europa sólo el cuatro por ciento de niños y adolescentes no cuentan con posibilidades de acceso, en África la cifra trepa a seis de cada diez.

Se estima que desde 2012, alrededor de cien millones de niños, mayormente de África y el sudeste asiático, accedieron a internet por primera vez. Al respecto, se advierte que «sin las debidas garantías, los niños más desfavorecidos del mundo correrán un peligro incluso mayor cuando se expongan al riesgo de sufrir daños en línea».

En Argentina, el 80% puede conectarse a internet, mientras que la mitad de ese número lo hace “casi todo el día”. La “adicción a la pantalla” es otra de las temáticas analizadas por UNICEF, en el marco de una “dependencia digital” al igual que la imposibilidad del idioma, ya que “el 56 por ciento de los sitios” sólo tienen sus contenidos en inglés.

En el otro lado del análisis, la entidad también presentó testimonios como un joven que desde un blog en El Congo da a conocer los problemas de la ciudadanía o el niño con parálisis cerebral que puede dialogar on line en iguales condiciones con sus pares.

El acceso a material didáctico con facilidad y el proceso de los “milenials” en ese contexto, puede sacar a la luz excelentes resultados, aunque la «pérdida de privacidad» se coloca como contraposición.

El informe deja seis acciones recomendadas como “prioritarias” para sacar el mayor provecho a la digitalización y evitar los riesgos que pueden generar diversos descuidos.

A saber: “garantizar el acceso de los chicos a recursos en línea de alta calidad, protegerlos de los abusos, la explotación, la trata, el acoso cibernético y la exposición a materiales inadecuados, proteger su privacidad e identidad, alfabetizarlos digitalmente para que estén informados y seguros, que el sector privado tenga la ética para proteger a los niños y ponerlos en el centro de la política digital”.

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