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Polémica: vecinos enrejaron y cerraron la casa de Pepe

Polémica: vecinos enrejaron y cerraron la casa de Pepe

Ayer por la tarde, la primera cuadra de la calle Mosconi mostró una novedad. La casa de Pepe, el querido personaje urbano de Alta Gracia, apareció enrejada y sin posibilidad alguna de acceso a su interior.

Esta vivienda, que fue semi destruida por un incendio intencional hace ya varios años, era utilizada regularmente por Pepe, quien iba y venía hasta lo que fuera su hogar antes del incidente. Pero también servía de refugio a indigentes sin techo y -de acuerdo a lo que dicen los vecinos- era utilizada por malvivientes que aprovechaban la soledad del lugar para usarla de base e intentar robos en las casas cercanas.

La decisión de enrejar la propiedad fue de uno de los vecinos de la cuadra, fundamentando tal medida en lo arriba descripto; una decisión que por cierto contó con la aprobación de algunos y el rechazo de otros. Sobre todo porque con la acción se invadió una propiedad privada.

Polémica: vecinos enrejaron y cerraron la casa de Pepe

Polémica. Grieta. División de aguas en torno a un tema que va más allá de las rejas. El Estado sigue ausente en este tipo de casos. A Pepe sólo la Municipalidad le ha dado una mano en alguna medida (le limpia regularmente la propiedad y le brinda atención médica en sus dependencias), pero no alcanza. Es una curita para sanar una puñalada a la altura del corazón. 

La casa, casi en ruinas no es más que el símbolo del desamparo al que el Estado (municipal, provincial, nacional) y el sistema mismo sumerge a los más desposeídos. Las paredes descascaradas podrá ser que sirvan de escondite a malvivientes; pero también le dan techo y protección a gente sin hogar, sin abrigo. Sin nada. Gente que por todo capital tiene sus problemas y sus enfermedades y que no encuentra contención donde debieran dársela.

Así de cruel es el Estado ausente, que deja en manos de vecinos la toma de decisiones (a veces acertadas, otras equivocadas) para problemas que no les corresponde solucionar.

Así, las rejas en casa de Pepe terminan siendo una anécdota.

Lo realmente importante es todo lo demás. Y para todo lo demás, quienes deben resolver miran para otro lado, forman comisiones, derivan a otros estamentos, arman gordos expedientes, pero nunca resuelven.

 

 

nakasone