El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, anunció que ordenó retomar la pena de muerte a nivel federal, tras 16 años sin usarla, con el objetivo de «traer justicia a las víctimas de los crímenes más horribles».
Barr transmitió su decisión a la oficina de prisiones y pidió al director del área, Hugh Hurwitz, que disponga las ejecuciones de cinco presos que fueron condenados a muerte por asesinato, y también por delitos de tortura y violación contra niños y ancianos. Las ejecuciones están programadas para diciembre de 2019 y enero de 2020.
El Tribunal Supremo restituyó la pena de muerte en 1976, sin embargo son los Estados más conservadores del sur, como Alabama y Misisipi, lo que actualmente implementan este castigo.
En 1988 fue el Congreso el que aprobó una ley que permitía ejecutar a personas condenadas por delitos de drogas. Pero, sin embargo, no se ha realizado ninguna ejecución federal en los últimos casi 20 años en EEUU.
Esta polémica medida del Gobierno de Trump abre un nuevo debate nacional, con opiniones totalmente enfrentadas sobre un tema que mantiene dividida a la sociedad estadunidense.
Fuente: Agencia Télam
